Entre comillas

Siempre que agarro un libro, el diario, leo Internet o converso con una amigo, lo que más me llama la atención son las frases entre comillas, en el caso de hablar con alguien son las respuestas cortas y precisas las que me dan desde risa hasta un gesto de afirmación, dicendo "cómo chucha no se me ocurrió antes, wn...".

Hay gente que es experta en meter las patas con 5 ó 7 palabras (eee, el wn tonto pa los números) u otros que con un par de frases pueden enamorar a la mina de sus sueños..otros las podemos espantar. Hay otro tipo de personas que hablan con tal autoridad que se hace dificilícimo llegar a cuastionarlos, como me pasaba con Ricardo Lagos, por ejemplo.

El otro día estaba leyendo algo en Internet y apareció una frase tremenda, no de esas que te hacen recordar al típico chileno vivo con sus respuestas rápidas, sino que al ingenioso y creativo que siempre tiene la razón perfecta pa tomarse un copate. Y quizás si alguno de nosotros lo hubiese dicho no me habría causado tanta risa, pero lo dijo nada más ni nada menos que una superstar llamada Pablo Neruda: "Machu Pichu, qué buen lugar pa hacer un asao". TRE-MEN-DO. Imagíiinate po, uno pensaría que se iba a tirar EL testamento y sale con esa...wenisima.

La otra frase que no merece ni el mínimo de respeto, pero puta que me da risa, es la que mi fiel amigo Thomas suele sacar a relucir cada vez que le cuento que me gusta una mina. Yo lo llamo o él me llama y hablamos sobre estas cosas, sobre las minas y si nos convienen y too eso. A ratos la charla puede ser madura e interesante, pero siempre, recalco el SIEMPRE, siempre me hace la misma pregunta con su voz de macaquero: Culéatela, wn, dale Jumbina y le day nomáh...dile que se presente a las amigas po y hacemos una orgía", ese es mi amigo, wn. Insencible y bruto, pero lo quiero, wn. Aunque tengo que reconocer que ahora, recién (ya tiene 24, era hora) logra decirme algo más.

Hoy le preguntaba al Yoyo cómo lo hacía él cuando pololiaba con la Mariana y salían juntos a carretiar, cómo lo hacía pa no mostrar la hilacha queando raja y darle jugo. Mientras tanto yo sacaba cuentas y cálculos de cuántas cervezas me tendría que tomar antes del caos, cuándo cachar que tenía que parar, si me convenía tomar pisco o vodka...todas esas cosas con el fin de saber cómo no espantar a una mina en la primera sita. Hace un rato ya lo había conversao con otro amigo y tratabamos de descubrir la solución, peor le dimos vueltas y vueltas y siempre había un pero, hasta que se lo pregunto al Yoyo y me responde "cierra el ocico po"...verdad ah, era lo más fácil y no se me ocurrió antes.

Eso era. Y no manden frases de furbolistas porque son más repetías que la cresta.

Nos vemos en las vacaciones, compañeros...

Pozzi.