Mi querido Felipe (Por Angélica Pérez, mamá de Felipe Otaíza -socio co fundador-)

Debido al célebre día de la madre recién conmemorado, le sugerí a mi progenitora que, por favor, escribiese algo respecto a mí y mis comportamientos de flojera. Aunque esperaba una respuesta negativa ante tal requerimiento, la veterana aceptó encantda, pronunciando una frase que me hizo pensar, pues venía acompañda de una risa maliciosa: -tengo harto material - me dijo.
A pesar que le solicité que no hubiera nada muy mamón, me acabo de convencer que definitivamente la mayoría de las madres no pueden ver los defectos de sus hijos, y por lo mismo terminan cayendo en la mamonería. Igual agradezco sus palabras, porque quiero a mi madre pos hombre.
Les presento lo que mi vieja piensa.


"Mi querido Felipe, hoy te puedo decir que tú y tu hermano lejos es lo mejor que me pudo pasar en la vida junto a tu papá.
Adoro todo lo tuyo, tu inteligencia, tu lado temperamental, tus calcetines botados en el suelo, tu toalla mojada en la alfombra, tu equipo de fútbol en el bolso por una semana, el olor que sale de ese bolso. Adoro cuando olvidas tu celular y te llamo, tu billetera perdida, tus idas a carabineros porque se te perdió el carné. Me encanta cuando debo abrirte la puerta a las 5 de la mañana por tus llaves perdidas. Tu pieza revuelta. Adoro cuando vas a jugar fútbol y te sacan con tarjeta roja porque te enojaste con tus adversarios. Adoro cuando has tomado unas copas de más y hablas tan fuerte; adoro cuando llegas del carrete y no quieres reconocer que vienes pasado a trago.
Y así podría seguir enumerando muchas mas “cualidades” tuyas pero no terminaría nunca mi amor. Lo demás no importa, para mi eres el hijo perfecto, lleno de amor y cariño hacia mi, te amo.

Tu mamá"