"El que no vive, no merece morir"

Haciendo uno de los miles de millones de trabajos que te mandan en la U, me encontré con una frase que me pareció digan de analizar “El que no vive, no merece morir”, y fue la que me motivó a hacer el trabajo, de lo contrario habría inventado cualquier cosa pa’ presentar.

Mientras más leo este principio de la humanidad, más me doy cuenta que el vivir no es sólo respirar y seguir la maldita rutina que, queramos o no, nos impone la tan corroída sociedad.

Vivir es darse cuenta de que hay un mundo inexplorado, que caminando podemos llegar a destinos que jamás nos imaginamos, que el hacer estupideces es bueno y de que no existen cosas estúpidas, sino que estúpidos que hacen cosas.

Que el ser flojos es un apostolado, así como lo es el arte, la ciencia, la historia… sino lo creen, lean todas las cosas que hemos escrito y se darán cuenta de que ser flojos es un modo de vivir, que a muchos les cuesta aceptar (no es el caso de los aflochis), por el maldito estigma social.

Vivir es gozar hasta el más mínimo de los detalles, y que no se saca nada con vivir estudiando o trabajando, si no se puede disfrutar de los beneficios que obtienes de esas actividades.

Es por eso que los invito a todos a que vivamos el día a día, que si tenemos que decirle algo a alguien lo hagamos sin miedo, que el momento se disfruta como si no fueras a tener ni un solo minuto más en la vida, porque nunca se sabe lo que podrá pasar.

Ah! y es mejor arrepentirse de las cosas que uno hace, que de las que dejó por hacer.

Montse.