Hotel Familiar
Suena el celular. Son las 8am, estoy acostado en calzoncillos y polera, deben haber unos 28 grados de calor afuera, y solo son recién las 8am. Suena tardíamente el despertador a las 8:01am. Miro hacia mi lado y Rocío ya no esta. Escucho sus pasos subiendo las escaleras de la casa. Abre la puerta y es ella trayendo el diario y algo para el desayuno. Esta vestida con la misma ropa de ayer. Yo también.
Han pasado 3 días de que llegamos a Buenos Aires y no nos hemos cambiado de ropa ni un solo día, salvo los calzoncillos, pero creo que una sola vez. Eso si, paso duchándome, el calor y la humedad me han tenido sudando desde que me baje del bus.
Rocío me deja el diario en la cama y comienza la ardua –en momentos desesperante –búsqueda de un lugar para alquilar. Para los que no sepan, en este lugar lo único que hay son edificios, no existen las casas y lo que se podría llamar una casa para la gente de aquí, para mi es realmente un edificio. No tiene otro nombre. Todas edificaciones de altura. Para el que ha buscado depto en Stgo ya debe imaginarse lo que debe ser buscar un depto y no tener los documentos que se piden originalmente y solo ser un “posible mal negocio” para el arrendatario. Nos falta lo mas importante: la garantía. Sin ella lo mas probable es que sigamos durante 30 años viviendo en pensiones estudiantiles o en algún hotel familiar con llantos de niños al otro lado de la pared y esperar la infinita fila para entrar al baño en la mañana. En los hoteles familiares habitan lo que para lo porteños es como la mierda de la ciudad, ósea: familias completas de inmigrantes del mismo continente (sus hnos bolivianos, peruanos y paraguayos), ancianos, alguna persona con discapacidad y en pobreza y nosotros, ósea, todos aquello que no tiene la famosa GARANTIA para poder alquilar un departamento en la ciudad. Es tan loco todo que incluso este hotel familiar sale mas caro que alquilar un depto en pleno centro de la ciudad.
La vida es cruel en esta ciudad, y lo sabemos por gente como un matrimonio amigo nuestro que tiene la edad de vuestros padres y por circunstancias de la vida terminaron hoy viviendo en un hotel familiar, en una habitación de tres por dos en donde la cama es toda el lugar y la humedad en las paredes parece realmente un juego “bello” del papel decomural. Tienen baño en la pieza, pero de eso mejor no hablar
Hoy retomo estas líneas y ya han pasado 6 días desde que llegamos a Buenos Aires, y por una extraña razón, hoy despertamos con todo el animo del mundo y seguiremos con nuestra búsqueda, para no terminar pasando nuestras vidas en la fila para entrar al baño.
Han pasado 3 días de que llegamos a Buenos Aires y no nos hemos cambiado de ropa ni un solo día, salvo los calzoncillos, pero creo que una sola vez. Eso si, paso duchándome, el calor y la humedad me han tenido sudando desde que me baje del bus.
Rocío me deja el diario en la cama y comienza la ardua –en momentos desesperante –búsqueda de un lugar para alquilar. Para los que no sepan, en este lugar lo único que hay son edificios, no existen las casas y lo que se podría llamar una casa para la gente de aquí, para mi es realmente un edificio. No tiene otro nombre. Todas edificaciones de altura. Para el que ha buscado depto en Stgo ya debe imaginarse lo que debe ser buscar un depto y no tener los documentos que se piden originalmente y solo ser un “posible mal negocio” para el arrendatario. Nos falta lo mas importante: la garantía. Sin ella lo mas probable es que sigamos durante 30 años viviendo en pensiones estudiantiles o en algún hotel familiar con llantos de niños al otro lado de la pared y esperar la infinita fila para entrar al baño en la mañana. En los hoteles familiares habitan lo que para lo porteños es como la mierda de la ciudad, ósea: familias completas de inmigrantes del mismo continente (sus hnos bolivianos, peruanos y paraguayos), ancianos, alguna persona con discapacidad y en pobreza y nosotros, ósea, todos aquello que no tiene la famosa GARANTIA para poder alquilar un departamento en la ciudad. Es tan loco todo que incluso este hotel familiar sale mas caro que alquilar un depto en pleno centro de la ciudad.
La vida es cruel en esta ciudad, y lo sabemos por gente como un matrimonio amigo nuestro que tiene la edad de vuestros padres y por circunstancias de la vida terminaron hoy viviendo en un hotel familiar, en una habitación de tres por dos en donde la cama es toda el lugar y la humedad en las paredes parece realmente un juego “bello” del papel decomural. Tienen baño en la pieza, pero de eso mejor no hablar
Hoy retomo estas líneas y ya han pasado 6 días desde que llegamos a Buenos Aires, y por una extraña razón, hoy despertamos con todo el animo del mundo y seguiremos con nuestra búsqueda, para no terminar pasando nuestras vidas en la fila para entrar al baño.
Tomás
posted by AFLOCHI at 6:55 a. m.
4 Comments:
Debe ser aburridor vivir así. Siempre pienso que cuando me vaya de la casa (de mis taitas) voy a echar caleta de msnos las comdiades de acá, que lo más posible no las tenga, por lo menos al principio.
derrepente les va a salir algo buenisimo para vivir.
cambiate ropa sipo, chochino.
uhmm puta yo vivo solo desde hace dos meses....osea solo solo, porque antes siempre vivi con amigos....debo decir que ni tan bakan....es increible como se ensucia una casa o depto en mi caso...que mierda no hay caso todos los días llegando de la pega hay que barrer...de donde sale tanto polvo....el baño lo mismo....que decir de la comida, mi refrigerador por mas weas que compre siempre pero siempre esta vacio....y eso que compro harto....pero todo eso se compensa solo por el echo de tener un espacio propio en que naaaadie webeeee ni nadie se meta.....bueno oajal encuentres luego eso tomás....
wena tomacho...
mientras mas leía mas me gusta villa alemana.
upa papapa
Felipe
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